Si no puedes identificar a este animal por su pata, sabes menos que el adulto promedio.

¿Crees que conoces a los animales? Piénsalo de nuevo. La mayoría de los adultos apenas pueden distinguir la pata de un león de la de un gato doméstico cuando se les recorta el pelo. Desde almohadillas adaptadas al desierto hasta garras que se agarran al hielo, desde tentáculos con ventosas hasta pezuñas blindadas, cada pie cuenta una historia de supervivencia de millones de años. 40 primeros planos extremos. Sin caras, sin colas, sin contexto, solo pura evidencia de las patas. Si puedes nombrar al menos 33, oficialmente ves el mundo de manera diferente al 95 % de los adultos. ¿Listo para demostrar que no eres promedio? Desplázate hacia abajo y conoce las patas que caminan, nadan... y a veces matan.

Visitante de la tienda de regalos del zoológico

¿Crees que conoces a los animales? Piénsalo de nuevo. La mayoría de los adultos apenas pueden distinguir la pata de un león de la de un gato doméstico cuando se les recorta el pelo. Desde almohadillas adaptadas al desierto hasta garras que se agarran al hielo, desde tentáculos con ventosas hasta pezuñas blindadas, cada pie cuenta una historia de supervivencia de millones de años. 40 primeros planos extremos. Sin caras, sin colas, sin contexto, solo pura evidencia de las patas. Si puedes nombrar al menos 33, oficialmente ves el mundo de manera diferente al 95 % de los adultos. ¿Listo para demostrar que no eres promedio? Desplázate hacia abajo y conoce las patas que caminan, nadan... y a veces matan.